Todo lo que hace (nuestros pensamientos, emociones y conductas) cumplen un propósito: maximizar el beneficio y minimizarnos el daño. Nada de lo que ocurre es fruto de la casualidad.
Sin embargo, en ocasiones, nos falta la clave para descifrar lo que hace, por qué lo hace o cómo podemos contribuir para gozar de una mayor salud mental.
Los psicólogos nos regimos por el Código Deontológico que establece el Colegio Oficial de Psicólogos.
En él se encuentran las directrices que guían la actuación del psicólogo para que sea siempre imparcial, honesta, confidencial y respete los supuestos básicos de ética y rigurosidad que una profesión tan delicada exige